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James Joyce: su vida, su obra.
Nancy Hagenbuch y Beatriz Rajlin
James Joyce se ha convertido en el escritor que revoluciono la lengua inglesa y en una figura central de la literatura europea. La influencia de la producción joyceana ha resultado tan innovadora que ya es común por parte de la critica hablar de un antes y un después de Joyce.
A continuación ofrecemos algunas de las trazas de la vida y de la obra del genial escritor irlandés. Una vida errabunda y cotidianamente heroica movida por la convicción de ser “El Artista” .
Los primeros Joyce de que tenemos noticias eran normandos que se establecieron en Irlanda a principios del Siglo XIX, cerca de Galway, en Cork, zona que aún se conoce como el país de Joyce.
Como todos los católicos irlandeses, los Joyce padecieron de una represión legal y cultural a través de las invasiones vikinga, normanda y más tarde la invasión británica.
Se conocen datos desde principios del Siglo XIX en que varios antepasados del escritor llevaron el nombre James Agustine Joyce. Fueron comerciantes, nacionalistas y anticlericales. Por otra parte del lado de las mujeres practicaban un ferviente catolicismo. En la historia aparece alternativamente la posesión de pequeñas fortunas debidas al comercio y de quiebras reiteradas por el mal manejo de los negocios.
A mediados del Siglo XIX, el que será padre del escritor, fue bautizado como John Stanislaus, nacido en 1849, en Cork.
Poseía una hermosa voz de tenor con la que animaba las reuniones, y se presentó en ocasionales conciertos. Deportista, se destacó en las regatas, las carreras de salto, y como actor y cantante. Sus dotes actorales lo llevaron a ser primer actor en todas las obras de la Sociedad Dramática del Queen’s College de Cork donde cursó tres años de medicina.
A la edad de 17 años, al morir su padre, recibe un legado importante, que le permite no trabajar y hacer malas inversiones.
Mudados con su madre a Dublín, se produce el encuentro con Mary Jane Murray, también aficionada a la música, tocaba el piano y poseía una hermosa voz. Se casan en 1880 pese a la ira de la familia Murphy y la oposición del padre de Mary. John manifiesta sin tapujos, toda su vida, el resentimiento hacia la familia de su esposa.
En este momento John Joyce consigue un puesto vitalicio en la Oficina General de Recaudaciones. Impuestos y Contrataciones
James Augustine Joyce nació el 2 de febrero 1882 en el barrio de Rathgar, suburbio de clase media de Dublín, en el 41, Brighton Square West.
Su padre John Joyce y su madre Mary Jane Murray tuvieron quince hijos de los cuales sobrevivieron diez, dos de ellos murieron de fiebres tifoideas, una enfermedad favorecida por la pobreza. Joyce no fue el primogénito, pero fue el mayor de los que sobrevivieron. Luego de una niña nacida al año siguiente, nace su hermano Stanislaus con quien Joyce va a sostener una particular relación.
Cuando John Joyce se traslada de Cork a Dublín a los veinte años de edad estaba en posesión del legado de su padre. A los cuarenta ya había perdido todo, incluso su trabajo en la Oficina General de Recaudadores de Impuestos y Contribuciones donde se apropiaba de lo recaudado, con la excusa de pequeños préstamos personales. Nunca más tuvo un empleo fijo. Fue un derrochador e incluso un gran bebedor que llevo a su familia al derrumbe económico, a través de hipotecas de sus propiedades en Cork hasta terminar por venderlas
Mary Joyce murió a los cuarenta y cuatro años de edad habiendo estado embarazada prácticamente toda su vida matrimonial.
La infancia de Joyce estuvo rodeada de nacimientos de hermanos y numerosas mudanzas, huyendo de los acreedores y en la búsqueda de algo más adecuado a su condición económica. En cada mudanza también se perdía parte del mobiliario.
A pesar de sus penurias económicas John Joyce, ese padre de los excesos eligió para su hijo mayor la mejor educación de la época. Joyce fue enviado en 1888 al Wood Collage de Clongowes, administrado por los jesuitas. Era la mejor escuela preparatoria en Irlanda. Desde los primeros años el pequeño Joyce produce creaciones literarias. El primero, a los nueve años, se titula “Et tu, Healy” y tiene como base la fuerte impresión que le causara la muerte del líder nacionalista irlandés Parnell, abandonado a su suerte por los seguidores y por la Iglesia Católica. Recordemos que Parnell se había convertido en el líder del movimiento de la Home Rule, que reclamaba cierto grado de autonomía irlandesa.
Joyce es admitido en el Belvedere College, también administrado por los jesuitas. Ahí ganó varios premios por sus escritos, algunos consistían en una suma de dinero con el que Joyce contribuía a la economía familiar.
Su educación concluiría en el University College de Dublín. En esta época Joyce se destacó como alumno aventajado, consiguiendo premios y mostrando su originalidad en sus inquietudes literarias. Son tiempos en que la escena literaria en Irlanda estaba ocupada por el llamado Renacimiento Literario Irlandés, quienes manifestaban sus deseos de hacer un reencuentro con la cultura irlandesa. Joyce se mantiene al margen de este movimiento porque considera que miraba al pasado. Sin embargo destaca la talla de dos escritores como Yeats y John Synge.
De Yeats aprendió a ver el mundo del arte como una esfera autónoma fuera del mundo pragmático de la experiencia cotidiana y a separar el arte del catolicismo.
A los 16 años, en 1898, traduce a Horacio y se sumerge en la obra de Ibsen. El 29 de Enero da una conferencia en la Liberaty and Historical Society de la Universidad bajo el titulo “Drama and Life” Al poco tiempo de esta presentación, publica un articulo sobre la última obra de Ibsen, “Cuando Despertamos los Muertos”, titulado “Ibsen`s New Drama”. También empieza a escribir lo que él denomina Epifanías, que consistían en una mezcla de poemas en prosa y esbozos descriptivos de determinados momentos que según él mismo contenían una especial revelación. Se trata de la expresión de cualidades interiores, de diversos aspectos de las relaciones familiares y sobre todo técnicas experimentales de realismo, materialismo y simbolismo de lo que él llama revelaciones del alma.
Entre 1899 y 1902 Joyce transita el University College de Dublín y es la época en que rompe con la educación católica que había recibido y en que emerge como escritor.
Joyce escribe su primera obra dramática, que no se ha conservado, dedicada a su propia alma, obra que muestra la gran influencia de Ibsen en su escritura.
Un trabajo de carácter crítico, lo conocemos bajo el nombre de “The Day of The Rabblement”, El día del populacho. En él Joyce hace explícito su rechazo al modelo cultural del Renacimiento Literario Irlandés, acusándolos de provincianos.
Joyce no era el único rebelde de la University Collage, su amigo Francis Skeffington era un feminista y pacifista. En este período entabla amistad con Oliver St. John Gogarty, hijo de una adinerada familia de Dublín; era un joven de gran talento que publicó algunos poemas gracias a la ayuda que recibió de Yeats; gran atleta, erudito y juerguista empedernido adoptó a Joyce durante un tiempo. En 1904 compartieron una habitación en la torre de Martello al sur de Dublín.
Joyce se graduó en la Licenciatura de Lenguas Modernas en la Universidad Real de Irlanda, en italiano, francés y alemán. El noruego lo había aprehendido por su cuenta para leer a Ibsen en el original. Dada su formación jesuítica, el latín y el griego le eran muy familiares.
Joyce comienza a sentir que el ambiente dublinés no es más adecuado para su crecimiento artístico, es así que con el pretexto de estudiar medicina decide viajar a París. A fines de 1902 marcha a Europa, pasando por Londres donde visita a Yeats.
En París dedica poco tiempo a cursar medicina pero se conecta con la obra de numerosos escritores y el ambiente bohemio. Abandona la carrera pero permanece en el continente; se solventa económicamente, pasando penurias, con el dinero de algunos artículos periodísticos que envía a Dublín y el que le aporta su familia.
En abril de 1903 un telegrama le anuncia la enfermedad de su madre y la urgencia de su regreso a casa.
Durante la enfermedad y la muerte de su madre Joyce se derrumba, bebe copiosamente acompañado por su amigo Gogarty. También estos meses son un tiempo de reflexión y recopilación de material para las futuras publicaciones. Escribe un ensayo titulado “Retrato del Artista” que intenta publicar en la revista “Dana” sin conseguirlo. Este ensayo constituye el germen de su obra “Stephen el Héroe”. Y escribe las primeras historias que luego formarán parte de “Dublineses”.
Poco antes del 16 de junio de 1904 conoció a Nora Barnacle, una chica de Galway (el país de los Joyce) que trabajaba de camarera en el hotel Finn de Dublín. Nora se convirtió en muchos sentidos en una figura central de la vida de Joyce hasta el final de sus días.
Con el pseudónimo de Stephen Daedalus, publicó un relato llamado “Las Hermanas” por encargo de Russell, y también envió una colección de poemas titulado “Chambers Music”“Música de Cámara” al editor inglés Grant Richards.
En octubre de 1904 Joyce partió de Dublín acompañado de Nora, sin que ni la Iglesia Católica ni el Imperio inglés consagraran esta unión. La partida se produce en dirección a Zurich, donde lo esperaba un cargo de profesor de inglés en la academia Berlitz.
Luego de una breve estancia en París, para pedir dinero prestado, al llegar a la ciudad suiza encuentra que Berlitz no tenía ninguna vacante para ofrecerle en Zurich, y lo envían a Trieste y de ahí a Pola donde por fin consigue un puesto de profesor de inglés.
Joyce reside en Pola hasta marzo de 1905 en que consigue una ubicación en Trieste, ciudad donde va a nacer su primer hijo, Giorgio. Abrumado por las nuevas cargas familiares recurre a su hermano Stanislaus quien viaja a Trieste para vivir con ellos. Comienza ahí una peculiar relación entre los hermanos entre enfrentamientos y reconciliaciones.
La nueva situación familiar no acaba de complacer a Joyce que en cuanto puede se marcha a Roma con su mujer y su hijo para trabajar en un banco. Mejor paga y horario más restringido parecía una situación propicia a la escritura. Asiduamente concurrían a la Ópera donde se deleitaban con Verdi y Puccini. Pero esta experiencia les resultó aún más penosa y regresan a Trieste. Ahí deja las clases de la academia y sólo da lecciones particulares que le proporcionan más dinero y le quitan menos tiempo.
En 1907 nace su hija Lucia, en el pabellón de pobres del hospital, mientras que Joyce estaba gravemente enfermo de fiebre reumática, internado, también él, en el hospital.
A principio de mayo Elkin Mathews publica “Música de Cámara”. Durante este período Joyce atravesó una considerable presión. Al igual que su padre, no siempre era capaz de mantener a los suyos. Logra salir de su fiebre reumática y escribe el último cuento de “Dublineses” titulado “Los muertos”, considerado hasta nuestros días como el mejor cuento de la literatura inglesa. Al poco tiempo abandona “Stephen el Héroe” y a partir de esta versión escribe “Retrato de un Artista Adolescente”, que será publicado fraccionado en Londres, pero su aparición en forma de libro deberá esperar a la muerte de su autor.
Joyce permanece en Trieste hasta que en 1909 decide visitar a la familia y amigos en Dublín, y viaja con su hijo Giorgio. En este viaje Joyce se enfrenta con sus fantasmas de traición e infidelidad y comienzan sus rencores y delirios contra uno de sus amigos, Cosgrave. Al mismo tiempo logra firmar un contrato para la publicación de “Dublineses”, y vuelve a Trieste con su hermana Eva.
Viaja nuevamente, esta vez solo, a Dublín e inaugura el primer cine de la ciudad, con el nombre de “Cinematógrafo Volta de Dublín”. El cine “Volta” acaba fracasando y el negocio financiero ocasiona pérdidas para la economía familiar.
Tampoco logra la publicación de “Dublineses” ya que fue considerado como demasiado atrevido, por su franqueza, para la sociedad irlandesa.
Joyce sigue sobreviviendo en Triste con clases de inglés y escribiendo artículos, en italiano para el periódico Il Piccolo Della Sera. Las deudas aumentaban y esto lo llevaba a huir de sus acreedores cambiando de domicilio, tal como lo había hecho su padre durante su infancia.
Joyce no volverá a Irlanda hasta 1912.
De nuevo en Dublín el poeta se interesó por la publicación de “Dublineses” tantas veces pospuesta. Su editor Grant Roberts seguía argumentando una serie de impedimentos, incluso cuando Joyce se decidió a comprar las planchas, el impresor las destruyó, así como a las copias que ya se habían impreso. Al saber esto el poeta comprendió que poco se podía hacer en Dublín y se marchó, esta vez para no volver.
En 1913 las cosas empiezan a mejorar. Yeats, enterado por el propio Joyce de sus dificultades económicas y editoriales, lo pone en contacto con el poeta Ezra Pound quien pide material a Joyce para una antología de poesías que se hallaba preparando. Asimismo Pound lo conecta con Dora Marsden, editora de la revista “The Egoist”, para la publicación, en forma seriada de “Retrato de un Artista Adolescente”. Pound también le sugiere un nuevo editor, esta vez americano, para los relatos de “Dublineses”.
“Retrato de un Artista Adolescente” comienza a ser publicada el 2 de febrero de 1914 y Grant Richards, primer editor de “Dublineses” vuelve a pedir a Joyce el manuscrito para reconsiderar su publicación, que efectivamente se produce en junio de ese mismo año.
Gracias a gestiones de Yeats y de Pound Joyce recibe una donación del Royal Library Fund y otra del British Treasury Fund.
Miss Weaver, nueva propietaria de The Egoist, no sólo se ocupó de la publicación de Dublineses, sino que estableció una donación periódica para que Joyce pudiera ocuparse sin sobresaltos de su trabajo de escritor. Lo mismo sucedió en Zurich con la Sra. de Harold Mc Cormick.
Tras terminar “Retrato de un Artista Adolescente” Joyce comienza a trabajar en la composición de “Ulises” pero lo deja de lado para escribir su obra de teatro “Exiliados”.
En Zurich, donde debió refugiarse durante la Gran Guerra, Joyce vive absorto escribiendo el Ulises, A fines de 1917 creía tener ya gran parte de su libro y esperaba publicarlo por entregas como “El Retrato de un Artista Adolescente” pero aquí se iban a plantear las mismas dificultades que se encontraron en sus obras anteriores.
Ulises resulto prohibida en los Estados Unidos, donde se estaba publicando por capítulos en la Little Review de Nueva York; la Society for the Suppressión of Vice acusó y le impuso una multa al editor prohibiendo la continuidad de la publicación por obsceno e indecente para el lector. Esta decisión fue objeto de un juicio de varios años y fue recién en la década del 30 que pudo publicarse el Ulises en los Estados Unidos.
Por consejo de Ezra Pound Joyce se traslada a París y allí conoce a la joven Silvia Beach, una americana que acababa de abrir una librería de lengua inglesa Shakespeare & Co. Poco antes de la condena en Nueva York, Silvia Beach decidió editar ella misma el Ulises en París, tarea a la que iba a dedicar sus próximos años.
Finalmente el libro sale a luz el día del 40° cumpleaños de Joyce, el 2 de febrero de 1922.
Ulises relata lo que les ocurre a dos personajes: Stephen Daedalus y Leopold Bloom, en Dublín desde las 8 de la mañana del jueves 16 de junio de 1904 hasta las 2 de la madrugada siguiente, con un apéndice desde las 2hs. a las 3hs. de esa madrugada, en la mente en duermevela de Molly Bloom, esposa de Bloom. El peculiar estilo con que está escrito deja ver un trabajo minucioso sobre la lengua, dado que altera la escritura de las palabras para dar lugar a múltiples interpretaciones de lo que está escrito. Siempre con un sentido musical impreso en la sucesión de palabras y también en la inclusión de canciones, partituras y alusiones operísticas.
Muy graves problemas oculares sufridos desde niño lo llevaron, entre 1923 y 1926 a someterse a nueve operaciones para paliar su iritis.
Tras la publicación de Ulises, Joyce tiene más posibilidades de viajar por Europa. Visita Londres, Niza, Bruselas, La Haya, Ginebra; Montecarlo, y muchos otros lugares, teniendo como punto fijo de alojamiento a París.
Se suceden varios eventos familiares importantes: el matrimonio de su hijo Giorgio en diciembre de 1930 y su propio matrimonio con Nora el 4 de julio del año siguiente para asegurar el futuro de los hijos.
A finales de 1931 muere su padre y ese mismo año nace su nieto Stephen James.
En París comienza la composición y progresiva publicación de la última obra de Joyce “Finnegans Wake”.
La nueva obra es más ardua y complicada en cuanto a su composición que cualquier otra que el escritor, o ningún otro, intentara hacer. El proyecto está terminado a finales de 1938 y aparece en forma de libro el 2 de febrero de 1939.
Poco después estalla la II Guerra Mundial y Joyce necesita abandonar París.
Tras solicitar asilo a las autoridades suizas, quienes en principio se muestran bastante reacias a concedérselo, necesitó la mediación de amigos, y finalmente consigue el permiso para viajar hacia Zurich, llegando ahí el 17 de diciembre de 1940.
El 13 de enero de 1941 falleció por una afección que luego se confirmaría como úlcera de duodeno.
Su mujer se negó, conociendo la posición de Joyce respecto de las prácticas de la Iglesia, a que se oficiara una ceremonia religiosa católica y fue enterrado en Zurich dos días después.